La Reforma del aborto preparada para su aprobación en el Consejo de Ministros. ¿Para cuándo?
La eliminación del supuesto de malformación como razón para abortar ha sido uno de los puntos que más escándalo ha suscitado, incluso dentro de las filas del partido popular. Sin embargo, el anteproyecto contiene toda una reglamentación encaminada a recortar y dificultar el derecho y el acceso de las mujeres al aborto de una forma cruel, autoritaria, misógina y paternalista que hace inaceptable la reforma sea cual sea su redacción final, se introduzca o no el aborto eugenésico.
Por otro lado, las discrepancias dentro del partido popular vienen motivadas principalmente por dos razones, una es la no inclusión en el anteproyecto de ley del aborto del supuesto de malformación fetal como causa para abortar. El otro motivo es el gran rechazo social que ha suscitado la norma y los resultados obtenidos por el partido en las últimas elecciones europeas, donde perdió seis millones de votos respecto a las generales de 2011 y 2,6 millones respecto a las anteriores europeas. En este escenario de crisis y conflicto social la aprobación de la reforma, para algunos dirigentes del PP, supone una complicación más, sobre todo de cara a las elecciones del año 2015. Algo que les preocupa y mucho.
Es muy improbable que la modificación introduzca un tercer supuesto de malformación fetal, ha esto se ha negado una y otra vez el Ministro Gallardón con argumentaciones falaces e hipócritas. Lo que finalmente parece que se ha introducido en la reforma es un listado concreto y cerrado de malformaciones fetales, siguiendo las recomendaciones del Consejo General del Poder Judicial.
A pesar de esta mínima modificación, la reforma sigue suponiendo un retroceso brutal en derechos conquistados y una vulneración de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres. Su aprobación supondrá un alto coste político al Gobierno que sabe lo que se juega, más en este contexto de crisis social, económica y de desafección política hacia los dos grandes partidos. Se encuentra entre la espada y la pared, este es el motivo por el que una y otra vez se haya retrasado la aprobación de la reforma de ley, esperando un momento más propicio pero ¿hasta cuándo? Gallardón ha movido ficha y anuncia que la reforma está ya terminada y lista para ser aprobada en el Consejo de Ministros. Ahora la patata caliente está en manos del Gobierno ¿se tramitará la norma antes de agosto? O ¿de nuevo será retrasada sine die?